2021-07-06
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Florencia padece la “enfermedad más rara del mundo” y ahora necesita dinero para un costosísimo tratamiento en Alemania




Florencia Genovart es una joven sanjuanina que tenía una vida normal, como la de muchas chicas de 24 años. Estudiaba Geología, hacía gimnasia y trabajaba como maquilladora y asesora de imagen. Pero todo eso cambió cuando comenzaron sus terribles dolores abdominales luego de una menstruación. Telesol Diario conoció su caso, que ahora llegó a los medios nacionales como Infobae, quienes publicaron una nota sobre su situación y la urgente ayuda que necesita. Pero esa ayuda se traduce en miles de euros imprescindibles para realizar el tratamiento en Alemania que podría ponerle fin a su calvario.


 


Si afrontar los costos de un alquiler en Buenos Aires, los traslados y los gastos médicos ya se hacían cuesta arriba, la posibilidad de viajar a Europa en busca de una solución parece aún más lejana. Encima de todo su padre falleció, su mamá es jubilada y no tiene hermanos. Hasta ahora se las arregló haciendo sorteos y rifas, mayormente entre la gente de amiga y conocida de San Juan. Pero la montaña podría ser mucho más alta: “El estudio solo sale 2.500 euros. El pasaje y la estadía ni me lo quiero imaginar. Y la posible cirugía vale 38.000 euros. No sé si Santi Maratea me podrá ayudar”, deslizó con una risa nerviosa, en alusión al influencer que ya concretó varias acciones solidarias.


 


Además de padecer endometriosis profunda, ahora le detectaron una de las enfermedades más raras del mundo. “Me operaron dos veces en menos de una semana y me descubrieron una de las patologías más raras del mundo. El síndrome de nutcracker o cascanueces. Hay muy pocos casos, alrededor de 200 en el mundo”, expresó.


 


Esta anomalía se produce por la compresión de la vena renal izquierda entre la aorta abdominal y la arteria mesentérica superior. Esto provoca un aumento de la presión entre la vena renal izquierda (VRI) y la vena cava inferior de hasta 3mm Hg, cuando el valor normal debería situarse por debajo de 1mm Hg. De esta manera, los septos entre las venas se rompan, produciendo una hematuria renal unilateral izquierda, es decir, que aparecen fístulas internas y un sangrado renal.


 


Los dolores que sufre la joven son indescriptibles. Además, hace tres años que esta postrada y por esa situación debió dejar todo: estudios, trabajo y deportes.


 


“La cirugía fue un éxito y lo felicitaron a mi cirujano a nivel mundial, pero no hay mejoría. No saben que pasa y mi cuerpo no da más de tantos golpes y dolores. Tengo que esperar una semana más para ver qué decisión tomar”, dijo.


 


“Antes tenía una vida demasiado activa, no paraba un minuto”, le contó a Infobae. Solamente le faltaba presentar la tesis para recibirse de geóloga. También, bailaba en una compañía de ritmos latinos en la provincia.


 


El calvario de Flor no solo pasa por los dolores, además, debió soportar cuestiones como por ejemplo viajar acostada 18 horas en la parte posterior de un taxi hasta Buenos Aires, porque no se puede sentar. Un padecimiento inhumano para cualquier persona.


 


En Infobae relató que en marzo de este año emprendió nuevamente el camino a la gran ciudad para realizar una embolización (obstrucción voluntaria de vasos sanguíneos). “Se encontraron con este síndrome de nutcracker o cascanueces ”.


 


De esta manera, decidieron colocar un stent en la vena renal, pero ella contó que van tres meses y está peor. “Venía por una embolización y, si no funcionaba me sacaban el útero, pero nadie se anima por miedo a que tampoco funcione, porque en ese caso sería una persona aún con dolor y sin útero”, explicó.


 


Las intervenciones continuaron y ya probó literalmente de todo. Terapias convencionales, alternativas, religiosas. La morfina tampoco le hizo efecto. Y hasta puso a prueba al padre Ignacio, el famoso cura sanador de Rosario. Pero nada.


 


En el medio, se unió a otras mujeres para realizar campañas que exigen una ley nacional de endometriosis. El principal reclamo es que sea reconocida en todo el país como una enfermedad crónica y que, en consecuencia, los prestadores médicos deban cubrir la medicación, los tratamientos, las cirugías y la atención psicológica necesaria. “Hemos luchado mucho en San Juan y no tuvimos respuestas”, reclamó.


 


Florencia necesita de todos. Su espíritu de lucha y sus profundos deseos de “volver a tener una vida” lo merecen.


 


¿Cómo ayudarla?






CVU Mercado Pago: 0000003100042857069948






Alias Mercado Pago: rubi.estopa.cuis.mp






CBU Banco Nación: 0110474930047425915383






Alias Banco Nación: bombo.caoba.amor




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