2024-03-28
Nacionales
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"ERA MUCHO SUFRIMIENTO"



Zamir tenía ocho años y fue apuñalado por su padre, Ariel Lovey quien murió pocas horas después tras dispararse con una escopeta.

El homicidio ocurrió este miércoles por la madrugada en una vivienda ubicada en el barrio San Roque, en la ciudad de Ibarreta, en Formosa, donde el pequeño fue hallado con heridas de arma blanca.

El filicida, identificado como Ariel Lovey, intentó suicidarse de un escopetazo. Tras varias horas de agonía, finalmente murió esta madrugada en el Hospital Central provincial. Pero previo a ello, en un video, había anunciado su aberrante decisión.

“Voy a hacer un video despidiéndome. Yo creo que esta es la mejor alternativa, porque sino mucho sufrimiento, tantos años... Zamir nunca va a lograr ser alguien normal”, dijo mientras conducía su auto, rodeado por la oscuridad de la noche.

Seguido de ello, continuó: “Esto ya lo verán cuando nosotros no estemos más. Pido un millón de disculpas a todos los que les hice daño. No fue mi intención, pero bueno. Era joven. Soy joven todavía, pero ya no voy a existir más. Yo no quiero que nadie me llore, ni que nadie me lamente, ni nada. Solamente que se me entierre y nada más. Bajo tierra, si es posible. Quiero que se olviden de mí”.

Lovey intentó quitarse la vida disparándose en la cara con una escopeta, pero no lo logró de inmediato. La policía lo encontró en la calle en el interior de un Fiat Punto, gravemente herido pero con signos vitales y lo trasladó de urgencia al Hospital Central de la ciudad, donde murió horas más tarde.

Según publicaron los medios locales, había nacido prematuro y tenía dificultades motoras en las extremidades inferiores. Su familia había creado una página de Facebook donde iban mostrando su tratamiento y la ayuda que recibían para poder llevarlo adelante.




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