Tensión entre Italia e Irán por la detención de una periodista
Cecilia Sala habría sido arrestada solo para intercambiarla por un ingeniero preso en Italia a disposición de los Estados Unidos, acusado por actividad terrorista
La detención de la periodista Cecilia Sala tensó la relación diplomática entre Irán e Italia, informaron medios internacionales. Sala, italiana de 29 años, duerme en el suelo de una celda helada, con la luz constantemente encendida, privada de sus gafas y del paquete con ayuda humanitaria que el embajador italiano en Teherán le llevó a la cárcel de Evin.
La Primera Ministra, Giorgia Meloni, organizó una reunión de urgencia con los ministros implicados en el caso, informó el sitio RFI. La reunión se centró en el respeto de los derechos y la dignidad de la periodista, además de la exigencia de su liberación inmediata, según informó la corresponsal de la cadena de radio RTL en Roma, Anne Le Nir.
Las relaciones diplomáticas se tensaron cuando Roma convocó al jefe de la diplomacia iraní, Mohammad Reza Sabouri. Teherán respondió llamando a la embajadora italiana, Paola Amadei.
El ministro italiano de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, insistió en la X en que el gobierno estaba "trabajando incansablemente para que (Cecilia Sala) regrese a Italia" y acotó que "hasta que no sea liberada, Cecilia y sus padres nunca estarán solos".
Pormenores del caso
La periodista estaría pagando las consecuencias del arresto en Italia del ingeniero Mohammad Abedini el pasado 16 de diciembre en virtud de una orden de detención internacional emitida por los Estados Unidos, bajo la acusación de terrorismo. "El Gobierno que está gobernando en Irán no es un gobierno normal, es una banda de mafias y tiene el lógico de las bandas de mafia. Tiene de rehén a una persona para conseguir liberar a otra como la moneda de cambio. Yo estoy seguro de que no conocían quién era ella. Solamente la República Islámica estaba buscando a un italiano, una italiana, para tenerlo en cárcel para preparar una moneda de cambio. Y eso no es la primera vez que lo pasa", opina el analista iraní Mojtabah Ruandeh, entrevistado por RFI.
La detención de la periodista Cecilia Sala tensó la relación diplomática entre Irán e Italia, informaron medios internacionales. Sala, italiana de 29 años, duerme en el suelo de una celda helada, con la luz constantemente encendida, privada de sus gafas y del paquete con ayuda humanitaria que el embajador italiano en Teherán le llevó a la cárcel de Evin.
La Primera Ministra, Giorgia Meloni, organizó una reunión de urgencia con los ministros implicados en el caso, informó el sitio RFI. La reunión se centró en el respeto de los derechos y la dignidad de la periodista, además de la exigencia de su liberación inmediata, según informó la corresponsal de la cadena de radio RTL en Roma, Anne Le Nir.
Las relaciones diplomáticas se tensaron cuando Roma convocó al jefe de la diplomacia iraní, Mohammad Reza Sabouri. Teherán respondió llamando a la embajadora italiana, Paola Amadei.
El ministro italiano de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, insistió en la X en que el gobierno estaba "trabajando incansablemente para que (Cecilia Sala) regrese a Italia" y acotó que "hasta que no sea liberada, Cecilia y sus padres nunca estarán solos".
Pormenores del caso
La periodista estaría pagando las consecuencias del arresto en Italia del ingeniero Mohammad Abedini el pasado 16 de diciembre en virtud de una orden de detención internacional emitida por los Estados Unidos, bajo la acusación de terrorismo. "El Gobierno que está gobernando en Irán no es un gobierno normal, es una banda de mafias y tiene el lógico de las bandas de mafia. Tiene de rehén a una persona para conseguir liberar a otra como la moneda de cambio. Yo estoy seguro de que no conocían quién era ella. Solamente la República Islámica estaba buscando a un italiano, una italiana, para tenerlo en cárcel para preparar una moneda de cambio. Y eso no es la primera vez que lo pasa", opina el analista iraní Mojtabah Ruandeh, entrevistado por RFI.